CULTURA
IDENTITARIA Y MARCO SIMBÓLICO.
La
Bandera Cruzada.
Un
movimiento Patriótico identitario no solo ha de caracterizarse por
plantear unas propuestas rupturistas y ofrecer unos planteamientos
nuevos con la intención de derrocar al régimen juancarlista y a su
corte de vividores corruptos al servicio de la gran burguesía
monopolista y la banca usurera, sino que también tiene la obligación
de crear una cultura identitaria y patriótica y hacer que esta se
imponga a toda la sociedad.
La
Cultura, y entre ella el lenguaje y también los símbolos visuales
son también instrumentos de propaganda política y mecanismos de
educación social. Los símbolos son un mecanismo de adiestramiento
popular y permanecen en el subliminal del inconsciente a lo largo de
la vida del individuo pues este los solicializa y los hace parte de
él.
Esto
no es nada nuevo, ya nuestros antiguos descubrieron las dimensiones
de la cultura identitaria y de lucha que se esconde en los símbolos.
No en vano, fueron los Españoles antiguos uno de los pueblos que más
simbología visual crearon. Símbolos que se alzaron como
Banderas i Estandartes y que fueron parte importante de las
sociedades antiguas.
Hoy
hemos olvidado la simbología que generó nuestro pueblo, que se
remota a las antiguas poblaciones de Celtas Hispanos, a Íberos, Godos y toda una retahíla de simbología que apareció en nuestra Edad
Media. Podríamos decir que la perdida de nuestra identidad tiene
que ver mucho con todo ese olvido.
Sin
los referentes identitarios visuales, auditivos e incluso litúrgicos
que marcaban nuestra vida colectiva, que eran parte diaria de las
vidas de nuestros antepasado, ante los que nuestro pueblo rendía
culto y respeto, fuimos perdiendo nuestra Identidad y el orgullo de
Clan inherente a toda las sociedad orgullosa que quiere seguir
viviendo a lo largo de los tiempos. Los Estandartes que colgaban de
nuestras murallas, las inscripciones en los pórticos de las
Iglesias, los símbolos antiguos grabados en milenarias piedras, las
pinturas en las Iglesias y ermitas, el repicar de campanas desde los
campanarios, el desfilar de los soldados con sus banderas, etc.,
suponían por si solos una cultura identitaria que se grababa en
nuestro inconsciente colectivo e individual y se convertía en algo
nuestro, en parte de nuestra memoria colectiva, en la llamada al
Clan, en respeto al pasado y a la tradición.
La
sociedad moderna ha sustituido a toda esa cultura identitaria por
mensajes vacíos en donde la única llamada es al consumismo. La
Comunidad y su marco simbólico ha sido sustituida por repugnantes
símbolos comerciales.
Con
la llegada del liberalismo y su corrompida Constitución de Cádiz
todo referente colectivo antiguo fue sustituido por símbolos o
liturgias propias de la masonería, arrancado nuestra idea de
comunidad, de camaradería, de sangre, de identidad y por eso todo lo
antiguo fue rechazado, tratado como de tercera, despreciado y
sustituido por símbolos modernos o que nada tenían que ver con
nosotros.
Más adelante, por ejemplo, veremos como a mediados del XIX en el plano arquitectónico se promovió
durante un tiempo una arquitectura arabesca que nada tenía que ver
con nuestro pueblo, en el plano del folk nacional se rechazaron
instrumentos antiguos como la gaita, las zanfonas, las danzas
regionales, etc., pues la burguesía liberal (= los Ciudadanos) las
despreciaban por su ruralidad. Durante un tiempo se rechazó todo lo
que tenía que ver con los naturales de nuestros territorios
históricos y se sustituyó por modas afrancesadas o de las cortes
europeas afeminadas ajenas a nuestro ser natural.
Como
hemos dicho los pueblos de Hispanía, fueron de los más prolificos
en este tipo de cultura visual y para ello habremos de dedicar varios
capítulos. Nuestra cultura identitaria va desde los símbolos de los
Españoles antiguos como trisqueles, tetratrisqueles, ruedas solares,
rosetas a los simbolos medievales como diferentes cruces cristianas
como la de Sant Andrés, de Sant Jordi, Santiago, etc., y banderas
con colores Pontificios o simbología de guerra como Leones, Castillos
de defensa, o Cadenas.
Como
Patriotas identitarios no solo hemos de recuperar nuestros antiguos y
verdaderos símbolos, sino que los hemos de promocionar, nos han de
servir como consignas de lucha que sustenten la cosmovision
tradicional, patriotica e identitaria que nuestro pueblo ha de de
desarrollar para seguir viviendo a lo largo de la história. Hemos de
recuperar nuestra esencia Hispánica pero no solo a nivel superficial
sino también a nivel espiritual para reconciliarnos con nuestra
historia y pasado. Los valores y normas de nuestros antepasados, de
las familias que nos precedieron y que se transmitieron de generación
en generación han de volver a imperar en todos los territorios de
nuestra nación. O defendemos y recuperamos el sentido espiritual,
identitario, religioso, étnico y patriótico que fué nuestra
quintaesencia a lo largo de los tiempos o solo seremos una España
pogre, podrida, individua lista, atea, mestiza, sin orgullo ni
identidad que perecerá en pocos años.
Con
el fin de no desaparecer vamos a identificar cual fue nuestro marco
simbólico y tratar de recuperarlo.
Para
ello confeccionaremos distintos artículos.
En
primer lugar hablaremos de la Bandera Cruzada.
En
segundo lugar hablaremos de la simbología antigua, trisqueles
tetratrisqueles, ruedas solares, etc.
Tetratrisquel, también llamado Cuatrefuellas, Quatrefulles o Lauburu según la zona de España
En
tercer lugar hablaremos de la bandera de Sant Jordi
En
cuarto lugar hablaremos de la banderas históricas y otros símbolos, así de las fechas patrióticas e identitarias que tendriamos que celebrar y lugares en donde todo patriota español tendría que visitar aunque fuera una vez en su vida.
La Imagen de Francesch Savalls como imagen de lucha.
Si nuestros enemigos llevan al Che Gevara... Nosotros a Savalls.
La
Bandera Cruzada o Bandera de España
En
este artículo vamos a tratar sobre el tema de nuestra bandera
Histórica, la Llamada Bandera Cruzada, o de las Aspas de Sant Andrés
o Cruz de Borgoña.
BANDERA NACIONAL, BANDERA DE LUCHA
Una
de las cosas de que el Patriotismo español de los últimos tiempos a
carecido es la de la importancia de los símbolos y de ese marco
simbólico. Aun podemos ver que cuando juega nuestra selección de
fútbol nuestro himno no tiene ni letra, y la gente ha de tararear la
misiquilla de la marcha real pues no hay otra cosa. Mientras tanto
hemos de observar como otras naciones cantan al unísono sus himnos
nacionales. Pero esto no es porque sí. Nuestros enemigos saben de la
importancia que tienen todo ese marco simbólico y no lo quieren para
nuestro pueblo.
Nuestro
primer símbolo nacional es el III Concilio de Toledo y su fecha el
8 de mayo del 589, pues allí se fusionaron definitivamente las
naciones de los españoles antiguos y las naciones goda y sueva
quedando ya sellada nuestra unidad espiritual, religiosa, étnica,
política y casi territorial.
LA
BANDERA NACIONAL: La Bandera Cruzada o Bandera de España como la
Primera y auténtica bandera
Uno
de esos símbolos que poco se sabe es el que versa sobre las
verdaderas banderas de España. Es verdad que había varias y aunque
la gente no lo sepa nada tienen que ver con la bandera roja y gualda
(o amarilla) que tantos la ven como símbolo nacional.
Pues antes de la bandera
rojigualda hubo otra enseña centenaria que identificaba a los
españoles: La Badera Cruzada también conocida como la cruz de
Borgoña. Se dice que la trajeron a España los reyes Juana I y
Felipe el Hermoso, miembro éste de la Casa de Borgoña, y enseguida
fue aceptada y hecha propia ya que las victorias militares de la
época en donde España hacia temblar al mundo junto con el
florecimiento cultural y otros avances favorecieron que ocupara el
lugar predominante entre todos los símbolos de la época.
Esto no es totalmente cierto ya
que algunas Compañias de Almogávares catalanes y aragoneses ya la
utilizaron siglos antes. El ducado de Neopatria la tenía en su
estandarte y escudo e incluso el titulo de Duque de Neopatria lo
siguen ostentando actualmente nuestros reyes (tanto la monarquía
legítima como la actual ilegítima que gobierna en lo que
abusaivamente se llama España.
La bandera Cruzada o cruz en
aspa de San Andrés, los Bastones Cruzados de Borgoña, se convierten
en símbolos de la Corona, los Tercios y la Armada españoles. Esta
bandera cubre ya en su época a buena parte de los territorios
históricos de la España histórica, incluyendo a Portugal. También
los usan las tropas no españolas del ejército, desde los irlandeses
a los alemanes.
Las Aspas y el color rojo se
mantienen como representativos de España después de la abdicación
del emperador Carlos V. A esta bandera le acompañan las de los
capitanes que mandan las compañías y los tercios. En ocasiones se
incorpora el escudo real, y en el mar los barcos suelen añadir a su
bandera imágenes religiosas como la Inmaculada Concepción, el
Apóstol Santiago y otras. El fondo blanco con las aspas en rojo
empieza a ser el más difundido aunque estos colores competirán con
otros.
Con el rey Carlos II
(1665-1700), según O’Donnell, la bandera ya "es común,
general, tradicional y nacional". Con la Casa de Borbón inicial, la
bandera se convertirá en "única".
LOS BORBONES DAN EL CAMBIAZO.
La Rojigualda sustituye a la Bandera Nacional y ondea en las
masónicas Cortés de Cádiz.
A medida que los Borbones van
integrándose en España detectan que los estandartes antiguos, sobre
todo el referente a la Bandera Cruzada (la de las Aspas de Sant
Andrés) se sienten incómodos. La bandera de las Aspas, para ellos no
deja de ser un estandarte que simboliza a una monarquía pasada, por
eso en 1785 Carlos III convocó el célebre concurso para seleccionar
un pabellón para sus buques de guerra. Según se nos ha dicho el
motivo era para que nuestro pabellón fuera más visible, aunque en
las razones algunos ya ven que se trata de ir cambiando la enseña
nacional por otra en donde los borbones se sientan más agusto.
Así el marino Antonio Valdés
y Fernández Bazán, ministro de Marina, presentó doce diseños al
rey, que escogió el conocido bicolor distribuido en tres franjas. En
las décadas siguientes, la bandera de las Aspas Rojas sobre fondo
Blanco siguió siendo la que identificaba a España y a sus
Ejércitos, y así ocurrió en la Guerra de la Independencia frente
al invasor francés.
Aún así, y a pesar de que el
pueblo sentía a la Bandera de Las Aspas como su enseña nacional, los
Constitucionalistas de la época, enemigos de los territorios
históricos, afrancesados y liberales hicieron ondear a la bandera
rojigualda en las Cortes de Cádiz. Enseguida, el cuerpo de cipayos
militar de la época, la Milicia Nacional, cuerpo reclutado y
mantenido por la burguesía progresista contra la Guardia Real, la
eligió como su pabellón.
Poco después, a impulsos de la
progresia y de los conservadores anticarlistas, mediante un
real-decreto de 1843, la reina Isabel II convirtió la bandera en
única para las embarcaciones militares y civiles y para todo las
unidades militares.
RECHAZO DEL PUEBLO Y DE LAS
VANGUARDIAS PATRIÓTICAS
El pueblo español y las
vanguardias patrioticas de la época tardaron mucho tiempo en
aceptar la rojigualda como su bandera nacional. Si alguno se pregunta
hoy porque esta bandera a diferencia de lo que pasa en otros países
con sus banderas no es tan querida, e incluso rechazada,
posiblemente se trata porque en el subconsciente colectivo hay algo en
ella que no causa especial simpatía. Es verdad que si no es querida
lo es por la falta de patriotismo, pero seguro que algo de ese
rechazo esta en esa imposición y el que hubiera sido sustituida por
la que el pueblo tenía como suya.
La derechona también aduce
que es por haber sido la bandera de régimen franquista, pero no nos
engañemos, no hace falta ser muy listo para ver que algo raro hay.
Si alguien presta atención verá
que la fuerza patriótica de choque, el carlismo, no la utilizó ni en
la primera guerra carlista, ni en la segunda. Prefirió utilizar
banderas con lemas y símbolos religiosos y patrióticos y solo al
final de la Tercera Guerra Carlista empezó a utilizarla.
Hoy en día y desde hace unos años el Ejército español la esta volviendo a utilizar como enseña militar
Desde el Frente Identitario
somos partidarios de ir recuperando nuestros símbolos y banderas.
Sobre todo esta bandera, la Cruzada o de las Aspas de Sant Andrés,
que fue Santa y Sagrada por lo que representó y representa y ES EL
SÍMBOLO MÁS IMPORTANTE QUE HEMOS TENIDO COMO PUEBLO. Esta
bandera no solo es de lo que hoya abusivamente llamamos España (los
reynos de Aragón, Navarra, Castilla y León) sino que también
cubrió a Portugal, a otros territorios nacionales que hoy
reivindicamos como nuestros y aparte también a todo el Imperio.
Los Borbones no tenian ningún derecho a suprimir la bandera Cruzada de las Aspas por la bandera rojigualda. Eso nos trae a la mente un hecho histórico que sucedió hace unos años (más o menos sobre 1950-1960). Elias de Tejada llevó al pretendiente carlista Don Jaime al Escorial. En el Escorial estan enterrados los Reyes de España desde los Austrias hasta los Borbones. En una zona determinada estan enterrados los Austrias y en el otro los Borbones. Pues bién, don Elias de Tejada le dijo a Don Jaime. "Tu eres de los de este lado (los Borbones) pero tienes que ser como los de éste otro lado (los Austrias).
Curiosamente ha sido el carlismo, como continuador de la Tradición de las Españas, quién ha puesto más énfasis en defender y en promover la utilización de la Bandera Cruzada, Aspas de San Andrés o Cruz de Borgoña.
Como Identitarios y Patriotas la
queremos como bandera de lucha y como Bandera Nacional ya sea en fondo rojo y aspas en blanco, o fondo blanco y aspas en rojo...
Foto del Cuerpo de Caballería con la Bandera de Las Aspas de Sant Andrés en fondo rojo y aspas blancas y la Cruz de Santiago Apóstol en el centro
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